
Chuck Donaldson, miembro del Concilio Distrital 47 de Jubilados de AFSCME en Pensilvania, acompañó a varios miembros del Congreso esta semana en los escalones del Capitolio en Washington, D.C., para proteger la Seguridad Social.
Afirmó que el programa de jubilación del gobierno federal les ayudan a él y a su esposa a llegar a fin de mes. Y les exigió a representantes en el Congreso que eviten lastimar a millones de personas de la tercera edad, quienes perderán sus hogares si dejan de recibir sus cheques de la Seguridad Social.
“Lo que les estamos pidiendo no es extravagante”, dijo. “Es la moralidad básica. Me gustaría que los políticos que desean recortar la Seguridad Social piensen en lo que están haciendo, no sólo en ahorrar dinero. Tengan compasión por las personas mayores”.
En la manifestación estuvieron presentes legisladores que apoyan a las familias obreras: el líder de la minoría en el Senado, Chuck Schumer de Nueva York; la senadora por Massachusetts Elizabeth Warren; el senador por Oregón Ron Wyden; el senador por Maryland Chris Van Hollen; y el representante por Connecticut John Larson.
Todos están luchando contra extremistas en el Congreso que dicen que no van a tocar la Seguridad Social, pero cuyas acciones muestran lo contrario. Estos extremistas y esta nueva administración quieren darles a sus amigos multimillonarios recortes fiscales incluso más grandes de los que ya tienen, y quieren lograrlo recortando servicios públicos y programas vitales como la Seguridad Social y Medicaid.
Nuestra unión está en el frente de la lucha por salvar la Seguridad Social.
A través de nuestra campaña Get Organized, los trabajadores tienen una voz más poderosa para oponerse a recortes imprudentes y exigir un cambio positivo para la gente común de nuestro país.